En nuestra escuela de Filosofía Yoga se enseña el camino directo para realizar a Dios, para eliminar el velo que oculta nuestra verdadera esencia, nuestra real naturaleza, Brahman, el uno sin segundo.
Sin embargo, aunque hay un sólo camino, existen dos medios para recorrerlo:
– Volando – Los buscadores que renuncian a la vida mundana y llevan una vida totalmente espiritual bajo un estricto celibato. Estos buscadores llevan consigo un peso inferior, el peso de los deseos y de los apegos, por eso avanzan por el camino de la realización del Ser mucho más rápido.
– Corriendo – Los buscadores que llevan una vida familiar y que a la vez tienen un sincero deseo de hacerse uno con el Supremo Brahman, Parabrahman. Estos buscadores tienen un “Dharma” que tienen que cumplir, avanzan más lento por el camino, pero “AVANZAN”, de manera segura y constante. Hay deseos que tienen que satisfacerse afín de poder liberarnos de ellos. Al final, lo importante no es sólo la meta sino también el camino que nos lleva a ella.
Una de las maravillas de esta escuela es que está abierta a todo el mundo y sus enseñanzas se adaptan a los diferentes niveles de consciencia de los buscadores que la integran.