A nadie le agrada el sufrimiento. Sin embargo, son muy pocos los que se detienen un momento para investigar los motivos de la enfermedad. Más del 95% de los males que aquejan a la complicada Sociedad Moderna podrían evitarse con una alimentación adecuada, suficiente ejercicio sicofísico, aprendiendo el arte natural de la respiración y utilizando siempre una postura correcta. Pero no hay tiempo para eso. El ser humano cada día se aleja más de la respiración natural y del ejercicio físico adecuado y por lo tanto apenas se está usando una tercera parte de la capacidad pulmonar. La alimentación actual es una magnífica fórmula para agravar los males físico mentales de la humanidad. Una vida sedentaria hace que más tóxicos se acumulen en el cuerpo, favorece el que más tensiones nerviosas queden atrapadas en la mente, sin ningún estímulo para ser eliminados. La postura incorrecta estimula el desequilibrio deformando cuerpo y mente.
Cuantos alimentos tóxicos, desbalanceados e inadecuados ingerimos diariamente convirtiendo el cuerpo con un cementerio. Estamos dejando escapar la salud a través de los sentidos. Es hora de gritar “ALTO” al crimen que día a día se comete contra el cuerpo. ¿Hacia dónde vamos dirigiendo a nuestros hijos, los futuros líderes del mundo privándoles de una dieta adecuada? Ni siquiera sabemos enseñarles cómo elegir los alimentos apropiados a nuestro sistema biológico; cómo combinar, balancear y utilizar esos alimentos para que se conviertan en instrumentos de la salud. Con el ejemplo, no somos capaces de demostrarles que el sentido del gusto necesita que se le eduque como cualquier otro órgano.
Pero cuan difícil resulta hacer comprender a la humanidad que la salud entra por la boca. Parece imposible hacerles dirigir la mirada hacia ellos mismos. Están muy ocupados en iras, cóleras, envidias, preocupaciones, apegos, críticas y odios como para cuidar su salud física y mental. El tiempo sobra para sufrir las consecuencias: enfermedades físicas y mentales, inestabilidad emocional, falta de concentración, escasa o ninguna fuerza de voluntad y por lo tanto no existe confianza en sí mismos. La vida entonces es cada día más desordenada, inestable y fugaz. Se pierde el deseo de vivir y se deteriora la personalidad.
La vida es alegría, vigor y salud. Significa un permanente deseo de vivir y fuerza físico-mental suficiente para sobreponerse a cualquier obstáculo que se presente en el sendero hacia el progreso. Es cuerpo fuerte, elástico y ágil, radiante de energía vital no importa la edad. Mente positiva, estable, rápida y alerta. Inteligencia creativa y personalidad magnética que irradie seguridad, madurez y confianza tanto a sí mismos como a los demás que le rodean.
Y en todo esto la alimentación juega un papel determinado pues hasta los pensamientos y los estados anímicos (emocionales) están estrechamente relacionados con el tipo de comida que ingerimos.
Hay ciertos alimentos que son puros, naturales y frescos. Estos estimulan los pensamientos y acciones positivas. La mente se mantiene clara, con dominio e ideas elevadas. Hay un segundo tipo de alimento que estimula o alimenta las emociones violentas como son la pasión descontrolada, vicios, iras, rebeldía y agitación. El tercer tipo de alimento conduce a la ignorancia más abrumadora, estimula los estados más bajos contribuyendo o incitando a veces a actos miserables.
Las sustancias tóxicas y residuos inadecuados contenidos en una alimentación mecánica, poco organizada y sin discriminación correcta son los causantes de la mayoría de las enfermedades. Estas sustancias perturbadoras se acumulan en cualquier órgano o tejido del cuerpo, y lentamente actúan deteriorándole en tal forma que inutilizan el sistema físico, haciendo de este un almacén de desperdicios y enfermedades.
EN RESUMEN:
Existe un tipo de alimento (Sattwico) que es puro, luminoso, que ayuda al conocimiento. Así, aumenta la vitalidad, energía, fuerza, salud, felicidad y estimula el hambre natural. Son sabrosos, sustanciosos y agradables. Sus signos sobresalientes: Jovialidad, Realización del propio Ser, paz Suprema, contentamiento, dicha y Devoción permanente.
Entre estos alimentos se incluyen los vegetales crudos y cocidos (preferiblemente crudos), frutas de todas clases de la estación y nueces. Incluye además harinas integrales, semillas, tubérculos y raíces. La leche puede ser incluida en este grupo.
El segundo grupo es de naturaleza pasional (Rajasico), fuente de deseo y de apego. Produce en las personas que lo ingieren pesar, sufrimiento y enfermedad. Sus características predominantes son: Lujuria, ira, avaricia, arrogancia, rencor, envidia, egoísmo, etc.
Encabezan esta lista las carnes de todas clases y sus derivados. Alimentos en conserva y alimentos con aditivos y preservativos químicos para su conversación, color o sabor. Además alimentos refinados (harinas refinadas, arroz pulido, azúcar blanca, etc…).
En un tercer orden se encuentran aquel grupo de alimentos (Tamásicos), que encadenan a la ignorancia. Atan mediante la pereza, inadvertencia y sueño.
Estos son alimentos impuros, descompuestos, mal oliente. Hace que las cosas parezcan distintas de lo que son. Hay ausencia de Juicio correcto, siempre se hacen juicios equivocados, carentes de convicción y siempre hay duda. Sus características típicas son ignorancia, languidez, torpeza, estupidez, etc. Aquel que come estos alimentos pierde toda comprensión y vive dormido o inerte como un poste.
Incluye alimentos en estado de descomposición, carnes y sus derivados, alcohol, cigarrillos, mariguana y otras drogas, etc., otras bebidas ferméntales y sintéticas.
De estos tres grupos de alimentos ¿Cuál está prefiriendo usted en la actualidad?
La calidad de la energía producida por el alimento metabolizado es diferente de acuerdo a la categoría del alimento utilizado. Cuando se quema por ejemplo un pedazo de madera seco, la calidad de la llama, del calor producido y la calidad de los desperdicios residuales (cenizas) obtenidos depende del tipo de madera usado y hasta del tipo de combustible. En la misma forma cada alimento produce energía de diferente calidad y cantidad. Mientras más sutil el alimento usado la energía contendrá una frecuencia vibracional más elevada, lo que producirá como resultado una mente más ágil y un cuerpo más saludable. El apartado digestivo es el encargado de hacer el alimento asimilable por la célula. Cuando el sistema digestivo esta integro, sano y funciona bien es muy fácil lograr una mayor salud.
Con una alimentación natural vegetariana y equilibrada se mantiene el Sistema Digestivo en óptimas condiciones anatómicas y funcionales. Recuerde que la salud entra por la boca. Las frutas y los vegetales crudos y recién cocidos producen una energía más sutil y de calidad superior. Esta es la energía preferida por el Sistema Nervioso, corazón y cerebro para su funcionamiento.
Del buen funcionamiento del Sistema Digestivo depende la Digestión y la Absorción de nutrientes. Cuidémosle al máximo, eligiendo una alimentación adecuada y dando un justo descanso entre comidas al mismo.
Aparato Digestivo
Órganos y situación
