Cuando se trata de hacer entender conceptos que por largos años han estado arraigados en la sociedad, surge el gran inconveniente de que la sociedad misma se opone con fuerza a razonar sobre las mismas ideas emitidas. Cuando esos conceptos han pasado de generación a generación y se han adueñado de la mente humana, es muy difícil encontrar personas maduras y con cierto desarrollo como para comprender conceptos lógicos que por falta de razonamiento permanecen obscuros aún.
Y es que esos conceptos erróneos que han pasado de generación a generación, y que la persona aprende desde muy pequeño, y continúa oyéndolos y repitiéndolos por toda la vida, bloquean la mente en tal forma que no se razonan, o peor aún, la misma sociedad indirectamente prohíbe su razonamiento.
¿Y qué desarrollo espiritual puede lograr una persona que prefiere quedarse con todas esas ideas absurdas metidas en su cabeza sin dejar entrar conceptos más profundos y sustanciosos a su mente? ¿Cómo va a manifestarse la experiencia en una mente que lo que hace es repetir como cotorra los conceptos que trae desde pequeño, sin evolucionar?
La verdadera fe nace cuando se tienen algunas experiencias que la fortalezcan. La experiencia es la base sobre la cual se establece la fe. Pero nadie progresa con experiencias ajenas. La fe muere cuando no se alimenta con experiencias. Es imprescindible que cada persona busque dentro de sí mismo esa experiencia que necesita para que su fe tome fuerza y lo conduzca por el camino verdadero. Porque con repetir lo que todo el mundo dice, no basta. Nadie puede transmitir su fe a otros. Y solo con el desarrollo de nuestra mente obtendremos ciertas experiencias que aumentarán enormemente nuestra fe y nos conducirán poco a poco a la verdad.
La mente sin desarrollo no puede entender las verdades emitidas en los grandes textos Sagrados. Es como pretender que un niño de tres años comprenda las leyes de física o el porqué de la teoría atómica. Porque cada cual entiende el mundo de acuerdo a su inteligencia, de acuerdo a su capacidad y de acuerdo a las experiencias que ha tenido. Mientras más madurez y desarrollo hay en la persona, con más facilidad pueden comprender el porqué de los diferentes fenómenos que ocurren a su alrededor. Porque esos textos Sagrados fueron escritos por grandes hombres Sabios. Y para comprender lo que un Sabio dice, hay que ser Sabio también. Por lo tanto, es requisito el desarrollar la mente, aumentar la inteligencia y hacerse más perfecto para así comprender a cabalidad las Sagradas
escrituras.
Muchas personas se conforman sólo con leer las Sagradas escrituras. Se aprenden todos los textos de memoria. ¿Pero de qué les sirve? Continúan con su mismo nivel de inteligencia, con su mismo desarrollo y por lo tanto su entendimiento continúa siendo limitado.
Todas las religiones afirman que ellas son las únicas verdaderas. Y todos sabemos la cantidad enorme de religiones que existen. Sin embargo, también conocemos que el MAESTRO JESUS no fundó religión alguna. El enseñó una doctrina, una filosofía universal. Entonces, ¿porque existen tantas religiones? Es simple. Ocurren porque cada persona tiene una inteligencia, un desarrollo y un nivel de evolución diferente a otros. Por lo tanto, cada cual entiende las palabras del MAESTRO JESUS en forma diferente. Todas las personas que están más o menos en una etapa de desarrollo mental similar, se unen y forman una religión y así cada religión tiene sus propias creencias. Si todas las personas tuvieran igual desarrolló, todos pensarían igual y por lo tanto solo existiría una sola religión en el mundo. Así es que cuando todos logremos perfeccionar la mente a tal grado que comprendamos las Sagradas escrituras tal como son, todos perteneceremos a una sola doctrina, que es lo más lógico.
Solo el desarrollo de la mente y el aumento en la inteligencia une a los hombres y los hace más comprensivos, llevándolos a la igualdad absoluta donde solo exista el amor y la comprensión y donde los otros importen más que uno.
Las Sagradas escrituras están escritas desde muy diferentes niveles de conciencia. Esto quiere decir que algunas personas que tienen escaso desarrollo entenderán muy poco. Sin embargo, aquellos que han tenido la oportunidad de lograr cierto desarrollo espiritual comprenderán más a medida que profundicen más y más dentro de ellos. Cada discípulo, de aquel gran MAESTRO JESUS estaba en un diferente nivel de evolución y por lo tanto, cada cual escribe dependiendo de su desarrollo e inteligencia, para así captar las vibraciones que le llegan del MAESTRO y entenderlas según su propio estado y sus experiencias individuales.
Por ejemplo, una persona con muy poco desarrollo, si tiene un accidente donde es atropellada por un vehículo, puede interpretarlo como castigo de DIOS, como mala suerte, o como obra del demonio. En cambio una persona con cierto desarrollo comprenderá que eso es debido a malas acciones que hizo en otra época, y ahora cae la reacción sobre él. Y así se le hará más fácil sobrellevar la pesada carga.
Cuando logremos obtener el desarrollo que tenía San Juan, entonces y solo entonces es cuando podremos comprender exactamente todo lo que EL quiere decir en “El Evangelio según San Juan”.
Mientras tanto, es mejor dedicar el tiempo a nuestro propio desarrollo, y no a discutir sobre lo que dice o no dicen las Sagradas escrituras, que a la larga nos puede traer problemas más graves aún.
¿Qué desarrollo puede tener una religión que afirme “yo soy la única verdadera”? Es lógico que todas las religiones son verdaderas. Pero también es cierto que unas religiones están en un nivel de evolución más elevado que otras y por lo tanto, comprenden mejor ciertas cosas que otros aún no pueden ver.
La religión la hacen los dirigentes y los miembros. Si los dirigentes de una religión cualquiera no tienen profundidad ni desarrollo espiritual, no pueden guiar como es debido a los miembros hacia la verdad. Porque alguien que no conoce el camino a DIOS, no puede guiar a nadie hacia DIOS, sino por el contrario, necesita alguien que lo guíe a él. Por eso es que muchas religiones se quedan estancadas siglo tras siglo. Por falta de dirigentes de profundidad espiritual, que conduzcan fielmente y con sinceridad a esa religión hacia la Sabiduría.
Si una persona por ejemplo está en cierto nivel de evolución, a él le va a interesar una religión que se encuentre constituida por personas que estén en ese mismo nivel que él está. Pero pasará por alto y hasta criticará (dependiendo de su desarrollo) aquellas religiones más altas o más bajas que la elegida. Claro está, él no tiene la capacidad suficiente para comprender el porqué de otras religiones más avanzadas y por lo tanto lo cree absurdo. Por otro lado, cree tonto también los cultos hechos en aquellas religiones que se encuentran menos desarrolladas que la de él.
Porque cada cual comprende la religión a su modo. Dependiendo de su inteligencia y su profundidad espiritual. Y eso es normal. No hay necesidad de críticas destructivas. Cuando todos comencemos a desarrollarnos, y olvidemos todo lo demás, la situación será diferente. Porque a pesar de tantas religiones, la Verdad es una sola. Y aunque algunas religiones se encuentren más lejos de la Verdad y otras más cerca, el camino es uno solo. No hay varios. El que quiera llegar a la Sabiduría tiene que seguir el mismo sendero, no importa la religión que sea. Una sola Verdad y un solo Sendero. Los católicos, protestantes, Testigos de Jehová, Yogas, etc., si hacen las cosas como deben hacerse, llegarán a un mismo punto: DIOS.
En occidente casi todo el mundo dice ser cristiano. ¿Por qué? Porque nació después de CRISTO, o porque fue bautizado, o porque su familia es Cristiana. 0 sea, son cristianos de nombre. Solo porque desde pequeño le dicen “Tu eres Cristiano y eso se quedó grabado en su mente. Sin embargo eso no es ser cristiano. Eso es tener muy poco desarrollo.
El verdadero Cristiano es aquel cuya Doctrina es lo único existente, aquel que se predica la religión o la filosofía Cristiana el mismo, antes de predicarla a los demás sin saber lo que está diciendo. Aquel que lleva uno a uno los mandamientos del Señor JESUS y que vive una vida en EL. Hay infinidad de predicadores “vacíos” por dentro. Predicadores de palabras huecas. Que no ponen en práctica lo que predican a la humanidad. Entonces, como pueden progresar los feligreses en esa forma? Las personas que lo escuchan se dan cuenta de que son palabras solamente. Solo teoría sin ninguna práctica. Porque en el fondo, ese predicador está menos desarrollado espiritualmente que los simpatizantes de la religión.
¿Cómo es posible enseñar algo que no conocemos? Un predicador, un representante de cualquier Sociedad Bíblica, debe conocer el camino a DIOS, por su propia experiencia. De lo contrario solo logrará el caos y la disconformidad en esa religión.
Primeramente viene el desarrollo personal del individuo, para luego ayudar en su desarrollo a los demás miembros de la Sociedad. Porque si el dirigente de una secta religiosa no conoce como dirigir su iglesia por un sendero, sin desviarla, entonces puede perderse toda la secta religiosa.
Y esto no se aprende leyendo la Biblia y a prendiéndola de memoria. Eso es solo teoría. Pero y la práctica? Práctica significa desarrollo de la mente, desarrollo en el campo espiritual, perfeccionamiento lento pero efectivo de uno mismo. Unión plena con el Ser Supremo, experiencia de haber encontrado a D I OS y de ser uno con EL.
Sin esta práctica, es muy poco lo que podemos hacer por los demás. ¿Podemos hablar sobre DIOS, pero qué podremos decir si en realidad no le conocemos de cerca?
¿Qué fe podemos hacer crecer en otros si no tenemos fe nosotros?
¿Cómo podemos convencer a los demás si no tenemos experiencias en el campo espiritual? Un ciego no puede guiar a otro ciego. Cuando uno pretende enseñar a los demás, sin uno saber nada, puede hacer mucho daño a los otros. A veces lo que logramos es que los demás pierdan la poca fe que tenían. Una persona vacía no puede dar, porque no tiene.
Medite sobre esto, y luego tome el camino de su propia realización, que es el camino verdadero.
En occidente, las personas se conforman con rezar siempre las mismas oraciones, que fueron inventadas por otro, leer la Biblia e ir a la iglesia una hora cada semana. Eso está muy bien. Pero no es todo. Falta lo fundamental, que son las prácticas espirituales. Falta el desarrollo, la purificación de la mente para comprender bien* las cosas de la religión. Falta ese perfeccionamiento que une al hombre a DIOS en toda su plenitud.
“YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA. NADIE VIENE AL PADRE SI NO ES POR MI”. El es el camino. Porque él conocía el camino y por lo tanto el puede llevar a los demás diciéndoles:
“Si haces éstos o aquello llegarás a unirte plenamente a DIOS, así lo hice y llegué. Yo puedo guiar, porque llegué al PADRE. Y cualquiera que haga lo que hice, también llegará. Porque todos somos Divinos. Todos somos hijos de DIOS. Todos somos uno por lo tanto, soy el hijo único y cada uno de ustedes es el hijo único de DIOS. Porque la Verdad es una y ustedes son uno solo. Y cualquiera de ustedes que siga el camino, se convertirá en el único hijo de DIOS. Porque cuando se está tan unido a DIOS, no existe dos cosas. Todo es una misma cosa. Solo tienes que seguir mis pasos. Solo existe un MAESTRO espiritual. Porque todos los MAESTROS son uno en DIOS. La unión es tan grande entre los grandes Sabios, que son uno. Soy el camino. Si sigues mis pasos. Si haces las cosas que yo te diga, tu también llegarás. Mira, tengo pruebas de lo que te digo. Lo que hice y cosas más grandes tu podrás hacer, si logras la unión con el PADRE. No hay diferencia entre tu y yo. Solo que yo dediqué mi vida a buscar a DIOS, y le encontré, y tu aún no has comenzado. Tu puedes llegar a ser más grande que yo, si lo deseas. Porque DIOS es infinito y también tu unión con EL es infinita. Vine para salvarte. Para salvarte del sufrimiento y de la ignorancia. Para decirte que
según me liberé de tan terrible agonía, tu puedes hacerlo. Sígueme”.
Para seguir a JESUS hay que hacer las cosas que el predicó. Hay que seguir al pie de la letra sus instrucciones. De lo contrario, no serás su discípulo. Aunque reces, leas la Biblia y vayas a la iglesia, si no sigues por el camino que el siguió, no creas que progresarás en el Sendero espiritual. Por eso hay tantos Cristianos en tan malas condiciones. Por eso la gente está todo el día en la iglesia y se aprende de memoria la Biblia, y su vida continúa siendo un desastre. Porque no hace las cosas bien. Entonces pierden la fe y dicen que la religión no sirve.
¿Y cuáles son las instrucciones que nos da JESUS?
SIGUEME. TOMA TU CRUZ, Y SIGUEME. ¿Por dónde? Actuando y pensando en la misma forma que EL. Amando a los demás sin esperar ser amado. Sin apegos. Dar sin esperar recibir. Amar manteniéndonos libres. El dio su vida por los demás. Mostrando el camino a DIOS, dando la experiencia de que el hombre es espíritu y no carne. Diciendo y demostrando que el hombre es inmortal. Y que todo lo que el hizo, nosotros podemos hacerlo. Demostró que existe la vida después de la muerte del cuerpo. El proporcionó esta experiencia, para convencer a los incrédulos, que la muerte no existe. Que es ilusión, porque el hombre fue hecho a imagen y semejanza de DIOS y por lo tanto el hombre es inmortal. “DIOSES SOIS”.
El apego es el causante del sufrimiento del hombre. JESUS no tenía apegos. El hijo del hom- bre no tiene donde recostar la cabeza”. Era libre. Jamás estuvo apegado a ninguna persona, animal u objeto. Siempre se le veía ayudando a los demás, sin egoísmos. Actuando inegoistamente. ¿Qué recibía JESUS a cambio de tantos sacrificios? A El no le interesaba, ni poseía bienes materiales. Toda su vida fue dedicada a ayudar a las personas interesadas en su propio desarrollo. Inegoistamente. Sin esperar nada a cambio. Dio su vida para que la gente comprendiera la verdad de sus enseñanzas, como prueba de que el hombre es inmortal. Dedicó su vida a los demás sin desear ningún fruto a cambio. Renunciando a los bienes materiales. Porque nadie puede servir a dos amos a la vez. Entonces para obtener un verdadero desarrollo espiritual es necesario renunciar a la vida de los sentidos, a la vida de los placeres mundanos, y usar toda esa energía que se desperdicia, en desarrollar la mente para disfrutar del mundo espiritual. El dinero, el sexo, el dormir y el comer no es el propósito
del hombre. Renunciando a éstos, se logra la perfección espiritual.
Purificando la mente a base de meditación, pensamientos positivos y acciones inegoistas. Ese es el camino. Renunciando al camino mundano y siguiendo el camino de la renunciación. Con la misma vara que midas a los demás, con esa serás medido. No hagas a nadie lo que no te gusta que te hagan a tí. No se puede progresar mientras hayan pensamientos egoístas y negativos en la mente, aunque aparentemente sea un hombre dedicado a DIOS. Hay que purificar la mente y así perfeccionarlas poco a poco. Y eso se logra a base de meditación continúa, de pensamientos positivos, de acciones inegoistas. En fin una vida dedicada a EL. Siguiendo el camino que EL siguió:
“Si deseas ser feliz, verdaderamente feliz y hallar el verdadero ser que mora en tu interior: Toma tu cruz y sígueme. Sigue mis pasos. Que yo te haré descansar. Descansa en mi. Sé el camino. Yo te llevaré. Pero tienes que seguir al pie de la letra mis instrucciones. No puedes cansarte. Sin razonamientos, sin lógica. Sígueme. Deposita todo a mis pies. Yo te llevaré. Entrégate totalmente a mí. Ya no tendrás que pensar, porque yo pensaré por tí. Te guiaré. Te diré todo lo que tienes que hacer. Porque sé el camino. No te dejaré caer. Si adquieres mi Gracia, serás uno conmigo, y ya nada ni nadie podrá evitar que llegues al PADRE. No se puede llegar al PADRE si no es a través de el hijo. Y el hijo único significa cualquier persona que haya logrado la iluminación. Cualquier gran Sabio es el único hijo. Porque cuando se logra la iluminación, el hombre se diluye en DIOS y pasa a ser la misma fuente de todo cuanto existe.
JESUS no podía llevarse a todos sus discípulos con EL, porque aún no estaban preparados. Aunque eran discípulos muy adelantados, aún no habían logrado la plena iluminación. Pero cuando lograron su pleno desarrollo, ya serían uno con EL. Igual a EL en todo sentido. Y también ellos serían el hijo único de DIOS.
JESUS nunca dijo que EL era el único MAESTRO Espiritual. Por el contrario dijo de JUAN EL BAUTISTA que entre los profetas, EL era el más grande. Y JUAN EL BAUTISTA fue MAESTRO de JESUS. Y esos grandes discípulos de JESUS también fueron MAESTROS e hicieron muchos discípulos que también se convirtieron en el unigénito hijo.
Todos los grandes y Sabios MAESTROS son el hijo unigénito de DIOS. Todos son uno con DIOS. Y cuando nosotros por nuestra propia voluntad nos desarrollemos y nos perfeccionemos, también pasaremos a ser ese hijo unigénito, porque todo aquel que haga la voluntad del PADRE, ese es el único hijo.
Nadie puede llegar a la iluminación si no es por medio de un MAESTRO espiritual que esté realizado, que conozca el camino, que sea el hijo único de DIOS. Cuando el MAESTRO reúne estas condiciones, y el discípulo sigue al pie de la letra sus instrucciones, el sendero estrecho al comienzo, se va haciendo más y más ancho a medida que continúa el desarrollo. Y así se hace más y más Sabio el aspirante, hasta llegar a la meta anhelada. Cuando hay sincronización, la sabiduría del MAESTRO es transmitida al discípulo a medida que avanza por el sendero. Así como JUAN EL BAUTISTA transfirió sus realizaciones a JESUS, JESUS las transmitió a sus discípulos y los discípulos de JESUS las transmitieron a sus discípulos. Así continúa la larga tradición que tiene su origen en el comienzo mismo de la creación. Así ha sucedido con todos los grandes profetas a través de todos los tiempos, y así continuará sucediendo.
Ser el hijo unigénito de DIOS significa iluminarse, obtener la Sabiduría interna, hacerse uno con el Ser Supremo, convertirse en MAESTRO Espiritual.
JESUS fue a preparar sitio para nosotros. Para cuando nos decidamos a buscar primero el reino de los Cielos, que está dentro de nosotros, para cuando nos olvidemos del materialismo inútil y nos introduzcamos dentro de nosotros hasta perfeccionar plenamente la mente. Para cuando aprendamos a sumergirnos en profunda meditación, dirigiendo los sentidos hacia nuestro interior para así desarrollarnos. Entonces aparecerá la verdadera PAZ, ARMONIA Y AMOR. Porque el verdadero reino de los Cielos no está allá arriba. Está dentro de uno. Ocurre cuando se está en plena sincronización con el ABSOLUTO. Si se logra el desarrollo y la unión plena con DIOS, recobraremos el Paraíso perdido. Entonces disfrutaremos del Jardín del Edén que está dentro de uno mismo, nunca afuera. Ese “lugar” que JESUS fue a preparar no es un límite. Porque está más allá del tiempo y el espacio. Es el premio que obtiene todo aquel que sigue sus instrucciones, que escoge el difícil camino del renunciamiento. Es la iluminación. Son esas realizaciones que se transmiten de MAESTRO a discípulo, luego de muchas pruebas y adiestramientos a través de los cuales el discípulo madura y se capacita para recibir todo ese torrente de Luz y Dicha Absoluta.
Ese sitio, no es un lugar para después que dejemos el cuerpo. NO. Es ahora. Mientras caminamos por la tierra. El cuerpo no es un impedimento para lograr la realización plena. Por el contrario, es el vehículo a través del cual se logra esa iluminación o Sabiduría. Ese lugar que E L fue a preparar es un estado de felicidad, de paz, de amor y de unión con el universo entero, donde se logra la Omnipresencia, Omnisapiencia y Omnipotencia.
Si tu fe fuera como un grano de mostaza, removerías montañas. Le dirías a esa montaña que tome otra forma y seguro la tomaría. Y ese lugar que preparó JESUS está dentro de tí mismo. Búscalo en tu interior, no en el espacio lejano, sino dentro de tí. Es la promesa de JESUS, de que el que siga sus pasos, algún día encontraría también la sabiduría universal. Unos primeros y otros después.
JESUS dijo que volvería… y ha vuelto. Y seguirá viniendo. Cada vez que un ser Iluminado, cada vez que un Sabio MAESTRO espiritual venga a guiar a las personas hacia la iluminación, ahí está JESUS.
Jesús nunca dijo que él era el más grande MAESTRO espiritual. Muy por el contrario, dijo que el que hacía la voluntad del PADRE, cosas como las que él hacía y más grandes aún también haría. Cuando alguien puede hacer cosas más grandes que El, es porque es más grande. El mismo afirma que existen MAESTROS Espirituales mucho más grandes que EL. Y en efecto es así.
Solo hay un solo DI OS, aunque tome diferentes formas. DIOS toma cuerpo humano cada vez que la religión declina y la corrupción prevalece. Toma cuerpo para ayudar a los buenos, para corregir y mostrarle el camino al interesado en su propio desarrollo. Para guiar al mundo hacia EL, que es el origen. Toma cuerpo humano, unas veces llamándose JESUS, otras veces BUDA, otras veces SHANKARA. Pero es el mismo DIOS, pues solo existe uno.
Cuando la religión declina, grandes devotos en todo el mundo, piden a DIOS, que tome forma humana, o sea que encarne en un cuerpo, para así ayudar a la humanidad perdida en vicios y en la inmoralidad. Y DIOS que es todo Amor, le oye y encarna de nuevo, tomando el aspecto de hijo único. Así surgen los grandes Iluminados, los grandes MAESTROS que de tiempo en tiempo hacen acto de presencia en la humanidad. Así surgió MOISES, así surgió NOE, así surgió JESUS, etc. El hijo y el PADRE son una misma cosa. Porque su unión es tan estrecha que son uno. El que ha visto al hijo, ha visto al PADRE. Porque el PADRE es el hijo y el hijo es el PADRE. Solo a través del MAESTRO Espiritual se llega a DIOS. Solo a través del hijo se llega al PADRE.
El es el Camino, la Verdad y la Vida. La verdad es una. Y todos los MAESTROS Espirituales son uno en DIOS. Por lo tanto todos los MAESTROS enseñan la misma verdad y el mismo sendero. Todas las sectas religiosas pretenden lo mismo, pero algunas de ellas están muy poco evolucionadas.
La verdad es una. Los MAESTROS, utilizando diferentes técnicas, enseñan esa única verdad y conducen por ese único sendero, hasta que el discípulo logre esa única meta, que es la iluminación.
La época en la cual JESUS aparece sobre la tierra, en donde la corrupción y el odio estaban ya centralizados en las mismas sectas religiosas, y donde el hombre concebía a DIOS como algo lejano y cruel, que castigaba al hombre por cuanto acto deshonesto cometía, sin amor ni piedad, es estremecida en forma muy contundente por su Divina presencia. El hombre solo buscaba placeres sensorios y la religión se había convertido en un pedir y pedir. Sin fe, y sin dar nada a cambio.
JESUS con su sabiduría acerca al hombre a DIOS. Les habla por primera vez de la unión plena con DIOS. Hombre y DIOS unidos en uno solo. Acerca a ese DIOS lejano y cruel y lo muestra tal como EL es: AMOR Y COMPRENSION. Pero la gente no le entendía. Ellos querían ganar el reino de los Cielos sin sacrificar los placeres mundanos. Y EL, gustosamente permite que se le Crucifique, para así mostrar a la gente que el hombre es Espíritu Divino, que no existe la muerte; para demostrar en forma palpable a aquella gente que el hombre es eterno, y que dentro de cada uno mora la Divinidad. Para que así creyeran en sus palabras, El permite que despedacen su Divino cuerpo, para que así observen con sus propios ojos la veracidad de sus palabras.
No es cierto que con la crucificación del MAESTRO JESUS, se borran todos nuestros pe- cados. No es cierto que E L llevó todos nuestros pecados en la cruz. El dijo: Toma tu cruz y sígueme. El cargó su cruz con resignación, con Amor, sin rehusarse. El amó al mundo, aún cuando éste le crucificaba. El hablaba y amaba a DIOS aún en los momentos difíciles del cuerpo. Es cierto que permitió la crucificación por nosotros. Para darnos el vivo ejemplo. Pero cada cual tiene que llevar su propia cruz. El llevó su cruz. Pero a cada cual le corresponde cargar con la suya. Y saberla llevar. No es solo llevarla. Es indispensable no aumentar el peso de esa cruz con acciones y pensamientos negativos.
Además, JESUS no murió en la cruz. Porque JESUS es inmortal. JESUS no era el cuerpo, si no que es Espíritu Divino. Es el hijo y el hijo y el PADRE son una misma cosa.
Todos pueden lograr esa sabiduría y esa santidad de JESUS. Aún más, cualquiera puede ser más Sabio o más Santo que EL, si se lo propone. Porque la perfección es infinita. Si no ¿Qué necesidad tenía de dejarse crucificar? ¿Por qué lo envió el PADRE si no fue para dar testimonio sobre la verdad de la vida?
El hombre a través de los siglos ha pensado y ha sentido como un ser imperfecto, lleno de debilidades, lejos de DIOS. Y esos pensamientos le alejan más de su verdadera naturaleza Divina. Porque poco a poco fue perdiendo esa armonía existente entre DIOS y el hombre en los comienzos de la creación. El hombre entonces era uno con DIOS, con todas sus cualidades y atributos. Entonces no había odios ni rencor y DIOS se manifestaba a todos. El hombre hablaba con DIOS y le veía en cada ser. Hasta que vino la serpiente, o la energía sexual que es lo mismo. Y el sexo y demás placeres sensorios comenzaron a apartar al hombre de DIOS, haciéndolo más débil. Porque DIOS es la fuente. Y a medida que se aparta el hombre de la fuente, es lógico que se vuelva más débil. Porque la conexión de la cual obtiene la fuerza está más distante y más frágil.
Y JESUS trajo la misión de mostrar a las ovejas el camino, con su ejemplo, con sus palabras, con sus actos. Diciéndoles yo soy el camino. Sígueme. Dejad que los muertos entierren los muertos. Deja que esas personas poco desarrolladas murmuren, critiquen, sigan en esa vida vacía que llevan. Pero tu, sígueme. Esos son muertos en vida. No comprenden nada. Pierden su vida miserablemente en vez de buscar su propio desarrollo. No hagas caso y sígueme. Ellos te dan agua pero esa agua no te quita la sed. Sin embargo, el agua que yo ofrezco, es pura, y te quita toda tu sed. Esta agua llena ese vacío que llevas
por dentro. Porque es el agua de la Dicha Absoluta, de la Espiritualidad y de la Inmortalidad.
Deja que brote de tu interior ese río de agua viva y así inunde todo tu ser. Sabrás entonces lo que es la felicidad. Deja que la luz radiante de tu alma brote como un torrente y te haga conocer por tu propia experiencia lo que es felicidad verdadera. Y conocerás a DIOS.
Dad a DIOS lo que es de DIOS. Y todo es de DIOS. Porque DIOS está en todas las cosas. Dad a DIOS EL ALMA, el cuerpo y la mente, porque eso pertenece a DIOS.
Pero no era al cuerpo de JESUS a quien habíamos de seguir. Ese solo lo vieron unos cuantos. No era a su imagen, No. Hay que seguir al verdadero CRISTO. Al que es uno con el PADRE. Al verdadero MAESTRO espiritual que se esconde detrás de cada persona iluminada que viene a llevar por el verdadero camino a las personas preparadas para entrar en el estrecho sendero de la espiritualidad. El objetivo del hombre es el de despertar su conciencia crística, o supra consciencia. JESUS, con su conciencia Crística despierta podía mostrarnos el camino. Nos podía orientar sobre la forma de despertar también esa conciencia Crística que se encuentra en cada uno de nosotros; pero que por falta de una forma efectiva de activarla, continúa latente en nuestro interior.
Al despertar la conciencia crística el hombre se une plenamente a DIOS, por lo que disfruta de la perfección y de la Omnipresencia, por ser uno con el PADRE. Es aquí cuando PADRE e hijo se funden para siempre.
Todas las enseñanzas de JESUS iban destinadas al despertar de esa supra consciencia. Y en toda su vida dio ejemplo de lo que el hombre era capaz de hacer. Dejó claramente ver que el hombre no es limitado ni imperfecto, sino por el contrario, que una chispa Divina moraba en su interior.
Aquellos pocos de entre sus discípulos que tuvieron fe en EL, ellos lograron la meta, de su vida: cada ser. Hasta que vino la serpiente, o la energía sexual que es lo mismo. Y el sexo y demás placeres sensorios comenzaron a apartar al hombre de DIOS, haciéndolo más débil. Porque DIOS es la fuente. Y a medida que se aparta el hombre de la fuente, es lógico que se vuelva más débil. Porque la conexión de la cual obtiene la fuerza está más distante y más
frágil.
Y JESUS trajo la misión de mostrar a las ovejas el camino, con su ejemplo, con sus palabras, con sus actos. Diciéndoles yo soy el camino. Sígueme. Dejad que los muertos entierren los muertos. Deja que esas personas poco desarrolladas murmuren, critiquen, sigan en esa vida vacía que llevan. Pero tú, sígueme. Esos son muertos en vida. No comprenden nada. Pierden su vida miserablemente en vez de buscar su propio desarrollo. No hagas caso y sígueme. Ellos te dan agua pero esa agua no te quita la sed. Sin embargo, el agua que yo ofrezco, es pura, y te quita toda tu sed. Esta agua llena ese vacío que llevas
por dentro. Porque es el agua de la Dicha Absoluta, de la Espiritualidad y de la Inmortalidad.
Deja que brote de tu interior ese río de agua viva y así inunde todo tu ser. Sabrás entonces lo que es la felicidad. Deja que la luz radiante de tu alma brote como un torrente y te haga conocer por tu propia experiencia lo que es felicidad verdadera. Y conocerás a DIOS.
Dad a DIOS lo que es de DIOS. Y todo es de DIOS. Porque DIOS está en todas las cosas. Dad a DIOS EL ALMA, el cuerpo y la mente, porque eso pertenece a DIOS.
Pero no era al cuerpo de JESUS a quien habíamos de seguir. Ese solo lo vieron unos cuantos. No era a su imagen, No. Hay que seguir al verdadero CRISTO. Al que es uno con el PADRE. Al verdadero MAESTRO espiritual que se esconde detrás de cada persona iluminada que viene a llevar por el verdadero camino a las personas preparadas para entrar en el estrecho sendero de la espiritualidad. El objetivo del hombre es el de despertar su conciencia crística, o supra consciencia. JESUS, con su conciencia Crística despierta podía mostrarnos el camino. Nos podía orientar sobre la forma de despertar también esa conciencia Crística que se encuentra en cada uno de nosotros; pero que por falta de una forma efectiva de activarla, continúa latente en nuestro interior.
Al despertar la conciencia crística el hombre se une plenamente a DIOS, por lo que disfruta de la perfección y de la Omnipresencia, por ser uno con el PADRE. Es aquí cuando PADRE e hijo se funden para siempre. Todas las enseñanzas de JESUS iban destinadas al despertar de esa supra consciencia. Y en toda su vida dio ejemplo de lo que el hombre era capaz de hacer. Dejó claramente ver que el hombre no es limitado ni imperfecto, sino por el contrario, que una chispa Divina moraba en su interior.
Aquellos pocos de entre sus discípulos que tuvieron fe en EL, ellos lograron la meta, de su vida: el desarrollo espiritual, la sabiduría o iluminación. Los demás, sin seguir su ejemplo, continuaron con su carga de sufrimientos sin lograr la liberación.
Cualquier persona que haya logrado el desarrollo de la supra consciencia o de la conciencia Crística, ese es el único hijo de DIOS. Porque se ha unido a DIOS y se ha fundido con E L en uno solo. Como cuando una gota de agua lluvia se une al mar y pasa a ser el mar. Así ya no hay dos, sino uno solo. Así también, todo el que logra la iluminación se convierte en uno solo, y por lo tanto en el único hijo de DIOS.
JESUS hablaba para aquellos pocos que tenían suficiente desarrollo mental para entender sus palabras. Los que tengan ojos que vean. Los que tengan oídos que oigan. Porque la época en la cual EL aparece es una época donde solo importaba el placer mundano. Y así eran pocos los que veían más allá de lo material. Por eso eran pocas las personas que comprendían sus palabras. Los Grandes MAESTROS actúan dependiendo de las exigencias del medio en el cual vienen a cumplir su misión particular. Cuando JESUS fue crucificado, muchos de sus seguidores perdieron la fe en sus palabras. Pero con la resurrección quedó grabada la experiencia que necesitaban para continuar por el sendero con suficiente fe como para vencer todos los obstáculos y unirse plenamente a DIOS.











































































































