A continuación, se cierran los ojos. En algunas formas de concentración se utiliza una vela, en las que el sujeto mira fijamente la llama. Efectivamente, por este proceso se desarrollan algunos poderes psíquicos, porque la intensa concentración siempre crea fuerza mental.
Esta técnica es empleada a menudo por hipnotizadores y por aquellos que sólo están interesados en utilizar los poderes inferiores de la mente. Pero esto no puede conducir al estado más sutil de conciencia porque el órgano de la visión sigue activo, y por lo tanto la mente consciente sigue funcionando, haciendo más difícil sumergirse dentro de la mente. Por eso en la meditación cerramos los ojos. (Recomendamos la técnica del Mantra Yoga Meditación)